Juan Maglio “Pacho” fue fundamental para la aceptación del bandoneón como instrumento musical del Tango.
Nacido en 1881, comenzó a aprender a tocar el bandoneón viendo a su padre tocarlo todos los días después del trabajo.
Prestaba atención a las posiciones de los dedos y luego las practicaba en secreto en el techo de su casa.
Asistió a la escuela hasta los 12 años, cuando comenzó a trabajar, primero en un taller mecánico, luego como peón en diferentes actividades, y luego en una ladrillera.
A los 18 años decidió adentrarse de lleno en su vocación: la música.
Durante los años de arduo trabajo, siguió practicando para mantenerse en forma para cuando la oportunidad golpeara.
Mejoró notoriamente, y desde su bandoneón de 35 botones, pasó sucesivamente a instrumentos de 45, 52, 65, 71, y por último, un bandoneón personalizado de 75 botones.