En 1940 es convocado por Rodolfo Biagi.
El 19 de junio de ese año, graba el tango “Todo te nombra”.
A partir de ese momento, nace un binomio que durante tres años se convertiría en uno de los rubros importantes de la década del 40.
El cantor pasa a ser la voz emblemática de la orquesta, destacándose por su personalidad y su modo expresivo y melodioso.
El sello Odeon lograba imponerse en el mercado gracias al éxito producido por el binomio Biagi-Ortiz.