El gran talento de Francisco De Caro se manifestaba ya a fines de los años ’20.
Era un pianista muy moderno, de una línea musical muy adelantada y como compositor, ni hablar.
Francisco fue un adelantado para su época y una suerte de padre de numerosos pianistas que siguieron esa escuela.
Fue un hombre muy humilde y sencillo.
Aparte de sus estudios musicales, era un intuitivo. Un gran creador y notable pianista.