Vinculado al mundo teatral y musical de la ciudad desde temprana edad y, consecuentemente al éxito, puede verificarse que su primer obra inscripta en el registro público de la propiedad llevó el número 505, en 1911, haciéndolo ese mismo día entre otros, un tema que le daría grandes satisfacciones: “La catrera”.
Tenía 26 años de edad cuando había registrado ya 38 temas, lo que nos da idea de su actividad.